¿Sabes lo que es una Unión Temporal de Empresas? ¿Quieres conocer como una UTE puede ayudarte a la hora de optar a una licitación pública? Aprovecha esta oportunidad para tu empresa y descubre todas las posibilidades que te aporta formar esta unión temporal.
A la hora de afrontar una licitación para el contrato de una obra o servicio público, una empresa puede encontrarse ante multitud de dificultades operativas: técnicas, logísticas, económicas, etc. Por ello, en este caso, debemos mirar hacia otras entidades que pueden disponer de una innovación o recursos que a nosotros nos puedan faltar.
Desde Ebone Servicios entendemos que la conformación de una oferta debe ser la mejor posible para el proyecto, transladandose esta calidad a los servicios, por lo que comprendemos a la perfección que atajar los obstáculos operativos supone el beneficio común para todas las partes involucradas en las licitaciones.
Estos obstáculos que pueden parecer insalvables en un principio, si solo contamos con los recursos propios, pueden solventarse uniendo nuestros esfuerzos y capacidades a una o más empresas de forma temporal y con objeto de aportar la mejor oferta para satisfacer los requerimientos de la licitación.
Constituir una UTE no supone mayor compromiso jurídico que el de proporcionar el mejor servicio a una licitación, pudiendo tratarse sus miembros de personas jurídicas y no jurídicas, incluso aunque no residan en España, conformando así una sociedad, que se hará titular, y responderá de forma individual en caso de ser la adjudicataria del contrato.
Es importante tener en cuenta que solo deberemos formalizar la sociedad temporal en caso de que la licitación sea concedida, y que a la hora de responder ante deudas y otras responsabilidades se hará de forma subsidiaria por cada miembro de la UTE y de forma solidaria e ilimitada por los actos que acometa la sociedad.
El carácter temporal de la UTE está claramente estipulado en la legislación vigente, comprendiendo únicamente la duración del contrato y con unos límites de 25 a 50 años según se valore la ejecución del mismo, tomando ese segundo límite de 50 años si nos encontramos con un contrato de obras y explotación de servicios públicos.
Por último, se debe entender la clasificación de la UTE en la licitación como la suma de sus partes. Cada integrante de la sociedad temporal deberá estar correctamente clasificada de forma individual para poder optar a la adjudicación, formando parte de la UTE.
Ahora que dispones del conocimiento de esta importante unión de fuerzas, podrás afrontar los contratos de licitación pública desde una perspectiva completamente nueva. La unión hace la fuerza y, en este caso, puede suponer adquirir importantes proyectos para tu empresa que quizás ni siquiera te habías planteado en un primer momento.