Si te has planteado dedicarte al sector deportivo, tus opciones no se limitan a ser entrenador personal o docente, la figura del gestor deportivo abre una serie de posibilidades profesionales que quizás ni siquiera te habrías imaginado en un principio.
¿Qué es el gestor deportivo?
Ya hemos tratado en otras ocasiones que la formación en ciencias del deporte ofrece un amplio abanico de posibilidades en tan diversos campos de trabajo como pueden ser la investigación o el rendimiento deportivo. Sin embargo, muchos olvidan que la gestión deportiva como salida laboral, ofrece incluso más posibilidades dentro de su concepto.
Pero, ¿qué es la gestión deportiva? Para resumir, podríamos decir que es el ámbito empresarial que comprende el deporte y la actividad física como recreo o de forma profesional. Sin embargo, el concepto ha ido evolucionando y también lo ha hecho la figura del gestor deportivo.
Desde esa idea original de aplicar las técnicas de dirección de empresas a una entidad que ofrece servicio o producto deportivo, el surgimiento de nuevas disciplinas y ámbitos, como los esports, hacen que el gestor deba ser un experto tanto en la parte puramente empresarial como en aquella que se refiere a la materia deportiva, única y específica, de cada disciplina o actividad física.
Un gestor deportivo actual puede llegar a un puesto de dirección formándose en ciencias del deporte, derecho, periodismo, marketing y en general con la gran mayoría de formaciones académicas; sin embargo, son una serie de aptitudes y actitudes concretas las que capacitan a estos individuos y que suele corresponderse con la vocación y valores que sienten por esta, tan a menudo, desconocida profesión.
Fundamentos del Gestor Deportivo
Algunas de las características y aspectos que desde Ebone consideramos que hacen destacar a la figura de los gestores deportivos, son las siguientes:
- Empatía: el técnico deportivo convertido en gestor debe conocer el deporte y a los deportistas desde dentro, comprendiendo cada disciplina y sabiendo que debe gestionar para el beneficio de las disciplinas y los deportistas más allá de los objetivos establecidos por cada entidad.
- Liderazgo: trabajar dirigiendo, liderando equipos y otros profesionales bajo su cargo, se convierte en el día a día de este profesional que deberá mantener su formación actualizada y adaptada a las cambiantes tendencias del mercado deportivo.
- Coordinación: coordinar departamentos y áreas de trabajo tan diferentes como pueden ser la gestión económica y la gestión deportiva de una instalación, hacen que el gestor deba conocer multitud de aspectos de tan distintos ámbitos de actuación, es decir debe ser extremadamente polivalente en sus competencias.
- Adaptabilidad: establecer horarios y llevar a cabo planificaciones a corto y largo plazo hacen que llevar el día a día de la entidad deportiva sea sumamente complejo, una tarea de supervisión y control que nos debe hacer profesionales atentos y minuciosos en nuestro trabajo.
- Ética: anteponer el bien de la entidad y los usuarios que forman parte y hacen uso de ella deberá ser el objetivo último del gestor; pues debemos considerar la promoción del deporte y la consecución de un estilo de vida saludable en la sociedad como finalidad principal de las entidades deportivas más allá de sus objetivos económicos y de desarrollo interno.
- Comunicación: el funcionamiento interno de la entidad será marcado por la capacidad de gestión de todas las áreas y como los mensajes e instrucciones se transmitan entre los distintos departamentos; con un lenguaje claro y objetivos delimitados que hagan que el flujo de información y los procesos establecidos se mantengan de forma óptima en el tiempo.
- Creatividad: buscar nuevas formas de operatividad y desarrollo de la entidad gestionada debe ser un objetivo personal del gestor, que reinvente y busque siempre la efectividad y la eficiencia en su mando y control, no limitándose a modelos tradicionales y desfasados por el cambiante ritmo de la industria deportiva.
Valores Profesionales
En primer lugar, uno podría simplemente señalar la evidente pasión por el deporte y la actividad física de estos profesionales, destacando la formación en ciencias del deporte en particular por la especificidad de sus conocimientos y su concreción en la aplicación deportiva.
Pese a ello, el carácter lúdico y la poca seriedad con la que el sector deportivo era tratado anteriormente daba lugar a que gerentes, técnicos y gestores deportivos en general, obviasen la parte formativa y se limitasen a ocupar esos puestos por puro sentimiento de pertenencia y su afiliación al deporte o disciplina en cuestión.
Esto, aunque encomiable y fundamental para el desarrollo de un sector que en sus orígenes no era (y sigue siendo para muchas disciplinas) tan lucrativo; daba lugar a entidades como clubes o instituciones ayudadas por el gobierno como las federaciones, que caían en graves fallos de gestión que hacían muy difícil su operatividad y por ende, el progreso del deporte y la actividad física de nuestro país.
Afortunadamente, con los cambios de tendencias en la sociedad, que ahora valora mucho más nuestro sector tanto a nivel del aficionado, como a nivel del practicante que ha convertido el deporte en parte fundamental de su vida; creándose, consecuentemente, la necesidad de un gestor deportivo que aporte una administración de las entidades deportivas ordenada y profesional.
Competitividad y Formación
Nos encontramos en un mundo mucho más competitivo profesionalmente, dónde el acceso a la formación y el aprendizaje ha mejorado considerablemente y en el que se busca a los mejores para que tomen las riendas de los proyectos deportivos.
El gestor deportivo pasa a ser la parte clave en la existencia diaria de estas entidades, la que le da su razón de ser y que sobrepasa a los simples logros deportivos o los resultados positivos en ejercicios económicos. En un mundo empresarial en el que la sostenibilidad está en boca de todos, el contar con un buen mando en tu entidad se convierte en el primer elemento a considerar en el organigrama.
En Ebone apostamos constantemente por la profesionalización y la formación para conseguir el desarrollo del sector deportivo; pues sabemos que esta posición, que en muchas ocasiones significa el éxito de las entidades que gestiona mientras el mérito se lo llevan otros, debe ser ocupada por alguien capacitado para gestionar y resolver todos los problemas que surjan mientras se busca cumplir con los objetivos propuestos.
Si todo lo anterior se corresponde con tus inquietudes y te atrae la posibilidad de gestionar eventos, competiciones, empresas y demás agentes del sector deportivo, se consciente de que la formación solo es el primer paso y que la figura de los gestores deportivos cada vez es más necesaria de cara a la profesionalización del sector.
Aprovecha y convierte tu perfil profesional a este oficio que constantemente se está revalorizando y ampliando sus ámbitos de ocupación, con herramientas y conocimientos como el desarrollo web y el marketing digital que tanta falta hacen en muchas entidades debido a la transformación digital.